La felicidad

sábado, 22 de marzo de 2008

Trata de ser feliz con lo que tienes,
Vive la vida intensamente,
Luchando lo conseguirás.

El dinero no compra la felicidad, no se sabe si es un sentimiento, un estado de animo o un valor a la alza o a la baja como en la bolsa de valores, hay quienes encuentran la felicidad en una pareja, en unas vacaciones, un bolso de marca o un paseo por el parque.

Para ser feliz todo vale, un estudio realizado por científicos de la Universidad de Edimburgo, concluyeron que la capacidad para ser feliz es hereditaria ya que los genes poseen un papel importante en la forma en como las personas perciben la vida, el otro 50% depende de factores externos como las relaciones sociales, la salud o el éxito profesional; también los autores del estudio afirman que, mas que genes de la felicidad existe una muestra de genes que determinan la personalidad de modo que se tenga mayor o menor tendencia a ser feliz.

Tal vez si nosotros no somos poseedores de esos agradables genes que resolverían de por si nuestra vida (porque la meta del ser humano es alcanzar la felicidad) hay dos formas que ayudan a contribuir la mejora de nuestro estado de animo.

La la doctora Gertraud Berka-Schmid, psicoterapeuta y profesora de la Universidad de Música y Arte de Viena, afirma que el cantar puede ser un medio para alcanzar la relajación, también genera armonía a nivel psíquico y refuerza el sistema inmune para que puedan actuar las capacidades de autosanación frente a problemas hoy día tan frecuentes como los trastornos del sueño, las enfermedades circulatorias.

Otro estudio reporta que realizar tan sólo entre 10 y 30 minutos de ejercicio diario puede hacer que las mujeres adultas (mas si tienen sobrepeso) adultas se sientan mucho mejor, así lo afirma un grupo de investigadores estadounidenses de la Universidad de Louisiana, que cuenta que incluso las mujeres que sólo realizan actividad física 10 minutos diarios tienen una mayor calidad de vida que aquellas que no hacen ningún tipo de ejercicio: tienen más energía, menos ansiedad y son más felices.

Moraleja: Si quiere ser feliz y no lo lleva en sus genes
cante cuanto este ejercitándose en la caminadora.